top of page

Y vos, ¿Con quién hablas?


El otro día tuve una graaaan charla de catarsis con amigas. “A calzón quitao…” con todas las verdades que tenés atragantadas y te cuesta sacar afuera. A simple vista podrías decir que no tengo filtro para decir lo que pienso, pero si me conocés un poco más, que también me guardo lo que pasa por adentro. Como siempre… rozando los extremos (#SiempreBipolar).

.

Tengo un grupo de íntimas amigas, que si bien hablamos a diario, siempre nos “recrimino” que nos cuesta decir lo que realmente nos pasa. Supongo que es normal… que uno no anda por la vida desnudando sus más íntimos sentimientos. Probablemente sería un problema. Pero, a veces, las capas de protección se van esfumando y salen a flote algunos temas más candentes. Y hablamos en serio. Y qué bien que hace. Y que importante que son las redes de contención, ¿no?

.

Los grupos de trabajo, familia, de arte/baile/zumba, de mamis, de amigas que conocen lo peor (y mejor) de vos… Siempre hay un grupo de WP listo para contener el tema del momento. Y las redes. Si hay algo que generaron son grupos de afinidad. Ese lugar entre anónimo y cercano con el que podes compartir con otros. Esos que no reconoces en la calle, y a su vez conocen una parte que tu amigo de toda la vida no tiene idea.

.

¡Y ay que cómo precisamos nuestras tribus! Las que tocamos en carne y hueso, las digitales, las que tengas. Las que te dan una cachetada para despertarte y te contienen cuando es necesario. Las que te bancan siempre. Y lo peor/mejor de todo… es que cuesta muchísimo reconocer que las necesitamos.

bottom of page